¿Qué es una prueba de detección? Una prueba de detección se utiliza para encontrar condiciones en personas que no tienen signos o síntomas. Esto permite un tratamiento temprano.
¿Por qué es importante el cribado de mamas? En México, una de cada ocho mujeres desarrollará cáncer de mama a los 75 años. Las pruebas de detección periódicas de las mamas pueden ayudar a detectar el cáncer en una etapa temprana y más curable. También pueden encontrar problemas en los senos que no son cáncer.
¿Qué es la mamografía? La mamografía es la principal herramienta utilizada para detectar el cáncer de mama y otros problemas. Se utiliza tecnología de rayos X para visualizar los senos, y las imágenes creadas se denominan mamografía. Un médico especialista en radiología las interpreta.
¿Por qué se realiza la mamografía? La mamografía se realiza por dos motivos: 1) como prueba de detección en mujeres sin signos o síntomas de cáncer de mama, y 2) como prueba de diagnóstico para evaluar bultos u otros síntomas detectados por un obstetra-ginecólogo (ob-gyn) u otro profesional de la salud. Esta sección se centra en la mamografía de detección.
¿Cómo debo prepararme para una mamografía? El día de la prueba, no debes usar talcos, lociones ni desodorantes. La mayoría de estos productos contienen sustancias que pueden interferir con la interpretación de la mamografía, dificultando su lectura.
¿Qué sucede durante una mamografía? Deberás desvestirte completamente de la cintura para arriba y ponerte una bata. Se te pedirá que te pongas de pie frente a una máquina de rayos X. Uno de tus senos se colocará entre dos placas planas de plástico, ejerciendo una presión firme. Las placas aplastarán tu seno para permitir una mejor visualización del tejido. Estos pasos se repetirán para tomar una vista lateral del seno, y luego se realizará la prueba en el otro seno.
¿Es dolorosa la mamografía? La presión ejercida por las placas puede causar molestias en los senos, pero es breve. Si aún tienes períodos menstruales, es recomendable realizarte la prueba la semana posterior a tu período, ya que los senos suelen ser menos sensibles en ese momento.
¿Qué significan los resultados? Los radiólogos utilizan un sistema llamado BI-RADS para clasificar los resultados de las mamografías. Se te asignará una puntuación que va del 0 al 5, y tiene los siguientes significados:
0: Se requiere más información. Es posible que necesites otra mamografía antes de recibir una puntuación definitiva.
1: No se observa ninguna anormalidad. Debes continuar con los exámenes de rutina.
2: Se observan condiciones benignas, como quistes. Debes continuar con los exámenes de rutina.
3: Se observa algo que probablemente no sea cáncer. Debes repetir la mamografía en un plazo de 6 meses.
4: Se observa algo sospechoso de cáncer. Es posible que necesites una biopsia.
5: Se observa algo altamente sugestivo de cáncer. Deberás realizarte una biopsia.
El informe de mi mamografía menciona la densidad mamaria. ¿Qué significa esto? Los senos están compuestos por tejido fibroso y grasa. Cuando los senos son densos, contienen más tejido fibroso y menos grasa. La densidad mamaria es un hallazgo normal y común en una mamografía, pero puede dificultar que un radiólogo detecte el cáncer. Si tu informe indica que tienes senos densos, tu obstetra-ginecólogo u otro profesional de la salud puede recomendar pruebas de detección adicionales además de la mamografía.
¿Qué significa tener un riesgo promedio de cáncer de mama? Una mujer puede tener un alto riesgo de cáncer de mama si tiene ciertos factores de riesgo, como antecedentes familiares de cáncer de mama, cáncer de ovario u otros tipos hereditarios de cáncer, mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2, tratamientos de radiación torácica a una edad temprana, o un historial de resultados de biopsia de mama de alto riesgo. Las mujeres sin estos factores de riesgo tienen un riesgo promedio.
¿Cuándo debo comenzar a realizarme una mamografía de detección? Para las mujeres con un riesgo promedio de cáncer de mama en México, se recomienda una mamografía de detección cada 1 o 2 años a partir de los 40 años. Si no has comenzado a hacerte pruebas de detección a los 40 años, debes comenzar a hacerte una mamografía a más tardar a los 50 años. Las pruebas de detección deben continuar hasta al menos los 75 años.
¿Qué precisión tiene la mamografía de detección? Al igual que otras pruebas de detección, la mamografía no es perfecta y puede pasar por alto el cáncer incluso cuando está presente. Cuando los resultados no muestran cáncer pero en realidad lo tienes, se llama resultado falso negativo. Los resultados falsos negativos pueden causar retrasos en el tratamiento. Por otro lado, la mamografía también puede mostrar algo que se cree que es cáncer, pero los resultados de las pruebas de seguimiento demuestran que no tienes cáncer. A esto se le llama resultado falso positivo. Las pruebas de seguimiento pueden ser incómodas y generar ansiedad.
¿Cómo se realiza un examen clínico de mamas? Tu obstetra-ginecólogo u otro profesional de la salud puede examinar tus senos durante los controles de rutina, esto se conoce como examen clínico de los senos. El examen se puede realizar mientras estás acostada o sentada. Se revisan los senos en busca de cambios en el tamaño o la forma, arrugas, hoyuelos o enrojecimiento de la piel. También se palpan los senos en busca de cambios y se revisa debajo de cada brazo.
¿Con qué frecuencia debo realizarme un examen clínico de mamas? Para las mujeres con un riesgo promedio de cáncer de mama y sin síntomas, se sugiere lo siguiente:
– Examen clínico de mama cada 1 a 3 años para mujeres de 25 a 39 años.
– Examen clínico de mamas cada año para mujeres de 40 años o más.
El autoconocimiento de los senos se enfoca en tener una idea de lo que es normal para tus senos, para que puedas detectar cualquier cambio, incluso cambios pequeños, y reportarlos a tu obstetra-ginecólogo u otro profesional de la salud.
El cáncer de mama a menudo es detectado por la propia mujer. Esto ocurre en casi la mitad de todos los casos de cáncer de mama en mujeres de 50 años o más. En mujeres menores de 50 años, más del 70% de los casos de cáncer de mama son detectados por las propias mujeres.
Si tienes 40 años o más, puedes iniciar la conversación con estas preguntas:
– ¿Cuáles son mis posibilidades de tener cáncer de mama?
– ¿Cuándo debo comenzar a realizarme mamografías periódicas?
– ¿Con qué frecuencia debo hacerme mamografías?
Puedes hacer preguntas más específicas según tu edad. Si tienes entre 40 y 49 años:
– ¿Cuáles son los pros y los contras de hacerme mamografías antes de cumplir los 50 años?
Si tienes entre 50 y 75 años:
– ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de hacerme mamografías cada 2 años en lugar de cada año?
Si tienes más de 75 años:
– ¿Necesito seguir haciéndome mamografías?
Tú y tu obstetra-ginecólogo u otro profesional de la salud deben compartir información, hablar sobre tus deseos y acordar cuándo y con qué frecuencia te realizarás exámenes de detección de senos.
Benigno: No canceroso.
Biopsia: Un procedimiento quirúrgico menor para extraer una pequeña porción de tejido que luego se examina bajo un microscopio en el laboratorio.
BRCA1 y BRCA2: Genes que controlan el crecimiento celular y están relacionados con un mayor riesgo de cáncer de mama y cáncer de ovario cuando presentan mutaciones.
Quistes: Sacos o bolsas llenas de líquido.
Mamografía: Procedimiento que utiliza radiografías de la mama para detectar el cáncer de mama.
Mamograma: Imagen creada mediante la técnica de la mamografía para detectar el cáncer de mama.
Mutaciones: Cambios permanentes en los genes que pueden transmitirse de padres a hijos.
Obstetra-Ginecólogo (Ob-Gyn): Un médico con habilidades especiales, capacitación y educación en la salud de la mujer.