La mamografía tridimensional mejora la detección del cáncer en mamas densas

Un estudio reciente presentado en una conferencia reveló que la mamografía tridimensional, también conocida como tomosíntesis digital de mama, tiene el potencial de aumentar significativamente la detección del cáncer en mujeres con mamas densas.

Cuando los senos contienen mucho tejido fibroso o glandular en lugar de tejido graso, se consideran densos. Se ha demostrado que los senos densos tienen una mayor probabilidad de desarrollar cáncer, lo cual se agrava debido a la dificultad de detectar el cáncer en las mamografías.

Aunque la ecografía y la resonancia magnética se utilizan para detectar cánceres que no son visibles en las mamografías, ambas técnicas tienen tasas más altas de resultados falsos positivos, lo que puede llevar a pruebas y biopsias innecesarias. Esto hace que la implementación de la resonancia magnética y la ecografía en programas de detección de alto volumen sea costosa.

El estudio investigó la tomosíntesis como una opción prometedora para la detección del cáncer de mama, ya que proporciona vistas tridimensionales de la mama y aborda algunas limitaciones de la mamografía convencional.

Los investigadores compararon la detección del cáncer utilizando la mamografía digital de campo completo (FFDM) versus la combinación de FFDM y tomosíntesis digital de mama en un grupo de mujeres de entre 50 y 69 años. Se clasificó la densidad mamaria según un sistema estándar, y se detectaron más tumores malignos con la combinación de FFDM y tomosíntesis en comparación con FFDM sola.

El estudio mostró que la combinación de FFDM y tomosíntesis mejoró la detección del cáncer en mujeres con mamas densas, así como en aquellas con mamas menos densas. Estos hallazgos son prometedores y sugieren un aumento relativo en la tasa de detección del cáncer, especialmente en casos de cáncer invasivo.

La implementación de la tomosíntesis podría marcar una nueva era en la detección del cáncer de mama, ofreciendo una opción más accesible y efectiva que la resonancia magnética y la ecografía.

En conclusión, la mamografía tridimensional demuestra ser una herramienta valiosa para mejorar la detección del cáncer de mama en mujeres con mamas densas. Este avance puede tener un impacto significativo en la detección temprana y en la mejora de los resultados para las mujeres en riesgo.