Las radiografías pueden ayudar a los médicos a diagnosticar cosas como:
– Huesos rotos
– Articulaciones dislocadas
– Artritis
– Dolor abdominal, en algunos casos
– Cáncer
– La caries dental
Los médicos también pueden usar rayos X para encontrar un objeto que se tragó un niño o un adulto. Se puede usar una radiografía para revisar sus pulmones en busca de signos de neumonía o tuberculosis, para averiguar por qué tiene dificultad para respirar o para ver si tiene insuficiencia cardíaca.
Otras formas en que los médicos usan procedimientos específicos de rayos X incluyen:
Mamografía: este es un examen que coloca su seno entre una placa de soporte y una segunda placa llamada paleta, luego se toman una serie de radiografías. Los médicos observan detenidamente las imágenes en busca de signos de cáncer u otros problemas.
Tomografía computarizada (TC): una computadora reúne una serie de rayos X, tomados desde diferentes ángulos, para crear una imagen en 3D y darle a su médico una imagen más detallada.
Fluoroscopia: a veces llamado ‘película de rayos X’, este procedimiento dispara una radiografía continua a través de una parte de su cuerpo para que los médicos puedan ver esa parte y cómo se mueve. Se realiza con mayor frecuencia para observar huesos, músculos, articulaciones y órganos como el corazón, los riñones y los pulmones.
