Una resonancia magnética es un tipo de imagen médica que utiliza imágenes de resonancia magnética (MRI). Se trata de un proceso de obtención de imágenes de alta resolución que puede revelar muchos detalles sobre las estructuras internas del cuerpo. Una resonancia magnética suele ser dos veces más cara que un examen de TAC, por lo que los pacientes a los que les preocupe el coste deberían informarse sobre otras opciones. Las resonancias magnéticas también requieren más tiempo y son más caras. Algunos pacientes experimentan claustrofobia y ansiedad durante una RMN.
Una RMN puede mostrar imágenes mucho más detalladas que un TAC. También puede revelar estructuras de tejidos blandos que son difíciles de detectar con un TAC. El médico puede solicitar una RMN si el TAC no proporciona suficiente información. Además, una RMN ayudará a determinar si el tejido que queda después del tratamiento es canceroso. Por ello, el médico puede recomendar una RMN después de un TAC.
La diferencia entre un TAC y una RMN radica en el tipo de imagen que realiza la máquina. Un TAC utiliza rayos X para crear imágenes transversales de los órganos y tejidos internos del cuerpo. Una resonancia magnética es más detallada y proporciona más información que un TAC. Una RMN puede detectar tumores que antes no eran visibles con un TAC. Un TAC puede mostrar la profundidad de un tumor, tanto si se trata de tejido sin recidiva como si no.
Un TAC utiliza rayos X y tecnología informática para crear imágenes de partes específicas del cuerpo. Este tipo de imagen puede proporcionar imágenes más detalladas que un TAC. Es ideal para diagnosticar tumores, coágulos de sangre y problemas en los pulmones. Aunque no siempre es necesario realizar un TAC, su médico puede elegirlo si es necesario obtener una imagen más detallada.
Un TAC puede revelar una variedad de condiciones en el cuerpo. La resonancia magnética también puede detectar enfermedades en el cráneo, los huesos y los órganos internos. Una resonancia magnética también puede utilizarse para detectar tumores en el cerebro. Además de detectar el cáncer, una resonancia magnética también puede detectar otros tipos de lesiones. Pueden ayudar al médico a diagnosticar un cráneo agrandado o un aneurisma.
La tomografía computarizada es el método de diagnóstico por imagen más utilizado para los cánceres. Una resonancia magnética utiliza imanes y ondas de radio para crear imágenes transversales de los órganos del cuerpo. También puede detectar irregularidades en los vasos sanguíneos. Las resonancias magnéticas también pueden diagnosticar aneurismas, infartos o tumores óseos. Y como no utilizan radiación, una resonancia magnética es una gran opción para las personas con una lesión cerebral traumática.
